Maestro Omraam
Como alumnos, vosotros debéis de estudiar, de trabajar
conscientemente para que aprovechéis las fuerzas que se
esconden en la Naturaleza viviente. Por ejemplo, en los dedos de
vuestras manos se esconde una serie de energías que podéis
utilizar al tiempo. Si carecéis de nobleza, mirad vuestro índice
para conectarse con las energías que fluyen a través de él. A través
de este dedo, vosotros aceptaréis las energías que vienen de
Júpiter. Si os falta sentido de justicia, conectaos con las energías
del dedo medio (de Saturno). Si no estáis dispuestos, acariciad un
poco el dedo anular (del Sol). No pasará mucho tiempo para que
vosotros sintáis que os volvéis gozosos, dispuestos por el espíritu.
Es suficiente que pongáis unas cuantas veces el dedo medio bien
lavado, en agua pura, para que el agua acepte las energías que
fluyen de él. Si bebéis esta agua, vuestra disposición se elevará.
Estos son una especie de medicamentos especiales, que se
esconden en el hombre mismo.
Hoy día toda la gente quiere ser feliz, sin sospechar que la
felicidad se esconde en sus pensamientos, sentimientos y actos.
La felicidad del ser humano se esconde en la mente, en el corazón
y en su voluntad. Para que adquieran esta felicidad, toda la gente
debe aprender a pensar, a sentir y a actuar rectamente. Para que
vengan a esta situación, ellos deben de auto-educarse. No es fácil
que el hombre se eduque a sí mismo. Para que el hombre se autoeduque,
se requiere mucho tiempo. Tal como el escultor trabaja
largo tiempo sobre una estatua mientras la moldea, también así el
ser humano debe trabajar largo tiempo sobre su mente, corazón y
voluntad hasta que forme algo bello en sí. Los trabajos grandes y
bellos requieren mucho tiempo y constancia. El hombre puede
confiar solo en su mente educada, en su corazón educado y en
su voluntad educada. En esta situación, el ser humano puede
confiar también en su cuerpo como un resultado de sus
pensamientos, sentimientos y actos. Sobre el trabajo consciente de
cada ser humano, se edifica su felicidad personal, así como
también la felicidad de las familias, de las sociedades, de los
pueblos y de toda la humanidad.
Así, en el deber de la auto-educación del hombre, está también
el deber de la coordinación de sus órganos, como también la
coordinación de las fuerzas naturales. Por ejemplo, el ser humano
debe saber cómo coordinar el calor y la luz en sí. Cuando la luz
del hombre disminuye, su calor debe aumentar. Cuando su calor
disminuye, su luz debe aumentar. A través de su pensamiento, el
hombre coordina las energías de la luz, a través de su corazón -
las energías del calor, y a través de la voluntad – los resultados
obtenidos de la luz y del calor. Esto es inentendible para vosotros
porque es una teoría. Ello debe aplicarse en la práctica para que se
os clarifique. Los discípulos no son capaces de entender cómo el
hidrógeno y el oxígeno pueden formar agua, mientras que el
maestro no hace su prueba delante de ellos. Para que llegues a ser
científico o músico, tú debes dedicar por lo menos 20 – 30 años
en una actividad intensa. Para que logre su ideal, el ser humano
debe utilizar mucho tiempo. Cuando trabaja sobre la realización
de su ideal, él se rejuvenece. El que no trabaja para la realización
de su ideal, envejece antes de tiempo.
Procurad lograr todo aquello que es sublime y noble. Procurad
lograr el Amor, la Sabiduría y la Verdad. La cuestión no es que
entendáis el Amor, sino que lo logréis. Si lo lográis, él os enseñará
durante toda la Eternidad. Por mucho tiempo que os enseñe,
vosotros nunca vais a aburrirse de él. Esto significa el versículo
de las Escrituras: “Ama al Señor tu Dios, con toda tu mente, con
todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza.” Lo
mismo se puede decir para el ser humano también. El hombre se
puede amar por causa de su mente, de su corazón, de su voluntad
y de su cuerpo. El cuerpo del hombre está hecho a imagen y
semejanza del mundo Divino. Por lo tanto, confiad en aquello que
está impuesto en vosotros. Estad contentos de su cuerpo y no
digáis que no os gusta como sois. Muchos pintan sus caras,
principalmente las mujeres, para que parezcan bellas. Pintad
vuestra cara, pero con la pintura del Amor.
Ahora os deseo que os pintéis completamente con el Amor.
Una pintura más inofensiva que el Amor no existe. El hombre
debe pintarse con el Amor no solo externamente, sino que lo deje
que penetre en todo su cuerpo. Cada organismo, creado por las
leyes del Amor, se distingue con una gran resistencia. La mente,
el corazón y la voluntad de tal hombre funcionan correctamente.
No hay fuerza más grande en el mundo que el Amor, que crea,
que organiza y que recrea las cosas. Cuando el Amor visite al ser
humano, su mente, su corazón y su voluntad, manifestarán una
actitud razonable. Donde la mente, el corazón y la voluntad del
hombre no trabajan razonablemente, ahí ningún Amor existe. Esto
lo que la gente llama amor, no es ningún amor. Una cabeza que se
vacía del amor, está lejos del Amor. En la cabeza vacía del
hombre podéis cernir trigo, machacar sal, obtener mantequilla,
pero nada más podrá salir de ella.
17 de Julio de 1938, 10:00 am. en Rila.
Lección dada por el Maestro Beinsa Duno
Trabajo realizado por Rayito y Dimitar
Centre OMRAAM
Institut Solve et Coagula
Reus
www.omraam.es
Primer Centro
De difusión de la obra
Del Maestro OMRAAM
En lengua Española
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