La sanación a distancia es muy semejante
a la sanación en persona, se actúa en el aura y chakras e igualmente se retiran
bloqueos energéticos o desequilibrios en los distintos niveles del ser.
Se realiza cuando la persona que la solicita ya sea por motivos de salud o por no poder trasladarse, no se encuentra presente junto a la
persona que la realiza.
Esta terapia a distancia significa usar y
canalizar la Energía Divina, de la naturaleza, del universo, para sanar, curar,
recuperar y aportar el equilibrio a una persona. Este tipo de Sanación no
es nueva, sin embargo es un arte que recientemente ha sido comprobado
científicamente. Las investigaciones muestran que un campo electromagnético puede tener influencia y hacer cambios en otro ser vivo similar aún cuando estén separados por la distancia.
Existe una cantidad enorme de información de cómo estamos
conectados y cómo cada uno tenemos un sistema energético similar. A través de este campo elctromagnético, como un puente podemos enviar a través de la energía mental mensajes energéticos (ondas vibracionales).
Somos seres energéticos y multidimensionales y la energía no tiene tiempo ni espacio (el tiempo es un invento del hombre).
Somos parte todos de una misma energía poderosa, y que a veces con solo pensar en una persona y desearle bienestar,
ese pensamiento viaja y llega a esa persona.
En cierta forma es muy similar a la oración, pues se ha comprobado que los rezos tienen un efecto similar llevando al cuerpo a un estado de equilibrio y armonía.
Esta forma de fomentar la sanación es
maravillosa, muchas veces incomprensible, pero es parte de la grandeza del
pensamiento, del amor y del Universo.
Debido a nuestra energía multidimensional, es por esto que los resultados de una sanación a distancia son tan efectivos y exitosos como la sanación personal.
Por los excelentes resultados que estoy observando en las terapias a distancia que he realizado, me ha motivado a crear esta entrada en el blog, además para aquellas personas que quieran probarlas, se animen y la soliciten. Para los que tengan Skype se puede estar conectados durante el tiempo que dura la sesión, (así solo separa la pantalla), trabajo igualmente en la camilla como si la persona estuviera presente y haciendo el mismo tratamiento. La persona puede estar tumbada y relajada al otro lado, poder compartir la experiencia, si tiene algo que comunicar durante el tratamiento, ya que se puede sentir el toque de las manos a través del cuerpo, (según me han comentado los que la han recibido) y por si surge algún dolor o emoción reprimida que suelen liberarse, poder comentar todo lo sucedido. Pienso que esta propuesta de Skype es interesante, porque puede ayudar a expandir los magníficos resultados que se obtienen y realizar un estudio sobre ello. Para los que quieran participar en este proyecto, comunico que realizaré cada día una de forma altruista.
Comunicar a través del correo maripr60@hotmail.com
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